YO QUIERO UN CLUB DE LEYENDA

Algunos dirán que, esto de este sábado 10 de noviembre, no ha sido una salida de club.

Y otros, dirán que lo de hoy es lo que debe ser y ha sido este club desde su fundación en el 1.989

Recuerdo perfectamente el año de mi incorporación, aquel 2007

Orientado por uno de los mejores ciclistas de montaña que ha tenido el corredor del Henares (Oki) se me ocurrió aparecer por la Plaza de Cervantes para montar con una tal llamada ''Peña Ciclista Rodríguez Magro''.

Me acuerdo de aquellas salidas a fuego,

de aquellas salidas donde me quedada día SI y día También,

de aquellas salidas donde mis mejores aliados eran Rafita y su rueda.

Me llamaban ''el mochilo'' porque llevaba una camelback llena de agua en la espalda.

Me decían ''el globero'' por llevar los tapones y las arandelas de las cámaras.

Alguno me llamaba ''gordo'' por no estar fino.

A base de hostias y de quedarme literalmente tirado, apajarado y abandonado por la carreteras, aprendí.

Empecé a entrenar.

Sin profesor, diseñé mis propios planes y acondicioné mi vida personal y profesional a este maravilloso mundo del ciclismo de alto rendimiento.

Yo, quiero un Club así.

Lleno de esa gente que sabe de lo duro que es esto del ciclismo,

que sabe que la superación no se consigue sin esfuerzo.

Quiero que cada salida sea un día de gloria, de orgullo, de reconocimiento, de asombro y DE LEYENDA.

No quiero que nadie venga de fuera a romper nuestra forma de montar ni de ser.

Las mejores personas y ciclistas de este club, son los que entienden el ciclismo de esta manera tan intensa.

Todo los nuevos socios y visitantes son siempre bien recibidos, pero,... ¡ojo!, aquí no se regala nada.

Si quieres estar, tienes que entrenar.

Si quieres que se te reconozca, tienes que ser una gran persona y darlo todo en cada salida, no vale ir escondido a rueda sin dar la cara en toda la etapa.

Y esto, no debe cambiar nunca.

Se nos llenaría el club de gente que no conocen nuestra filosofía.

Nos acabaríamos convirtiendo en un club mediocre.

La mediocridad no es para nosotros.

Siempre con una sonrisa en la boca,

hasta la batalla de mañana.